sábado, 24 de agosto de 2013

Se celebra hoy en Argentina el Día del Lector

Argentina celebra hoy el Día del Lector de acuerdo a lo establecido en la Ley Nº 26.754, que instituye el día 24 de agosto como 'Día del Lector', en homenaje al natalicio del escritor argentino Jorge Luis Borges. 

La ley aprobada por el Congreso argentino tiene como finalidad "promover la lectura y la democracia a través de la realización en dicha fecha de actos de divulgación de las letras y de reconocimiento a la obra y trayectoria de la máxima figura de la literatura nacional".

Borges, intelectual de vanguardia, fue creador de un estilo literario propio. Su obra incluye cuentos, ensayos y poesías.

Se trata de un reconocimiento a la obra y a la trayectoria de Borges más que merecido para un autor de gran dimensión en la literatura universal.


UN LECTOR

Que otros se jacten de las páginas que han escrito;
a mí me enorgullecen las que he leído.

No habré sido un filólogo,
no habré inquirido las declinaciones, los modos,
la laboriosa mutación de las letras,
la de que se endurece en te,
la equivalencia de la ge y de la ka,
pero a lo largo de mis años he profesado
la pasión del lenguaje.

Mis noches están llenas de Virgilio;
haber sabido y haber olvidado el latín
es una posesión, porque el olvido
es una de las formas de la memoria,
su vago sótano
la otra cara secreta de la moneda.

Cuando en mis ojos se borraron
las vanas apariencias queridas,
los rostros y la página,
me dí al estudio del lenguaje de hierro
que usaron mis mayores para cantar
espadas y soledades,
y ahora, a través de siete siglos,
desde la Ultima Thule,
tu voz me llega, Snorri Sturluson.

El joven, ante el libro, se impone una disciplina precisa
y lo hace en pos de un conocimiento preciso;
a mis años, toda empresa es una aventura
que linda con la noche.

No acabaré de descifrar las antiguas lenguas del Norte,
no hundiré las manos ansiosas en el oro de Sigurd;
la tarea que emprendo es ilimitada
y ha de acompañarme hasta el fin,
no menos misteriosa que el universo
y que yo, el aprendiz.

(Jorge Luis Borges)

jueves, 15 de agosto de 2013

Irineo Leguisamo debuta en Palermo

Tras consagrarse como uno de los mejores jinetes aprendices en Uruguay, Irineo Leguisamo debuta en Argentina el 15 de agosto de 1922, en el Hipódromo de Palermo, perdiendo con la yegua Mina de Plata. Cinco días más tarde lograría su primer triunfo en tierras argentinas montando a Caid del Stud Atahualpa, que perteneció a la legendaria Juana Mautone («La Dama del Turf»), ganando el Gran Premio de Honor en el Hipódromo de Palermo. Al año siguiente, Leguisamo lograría conquistar la primera de 14 estadísticas consecutivas, las cuales sumadas a las otras 7 que logró más tarde, constituyen hasta el día de hoy el récord de estadísticas logradas por un jinete en Argentina, con 21.  En 1935, Leguisamo ganó la primera carrera disputada en la historia del Hipódromo de San Isidro, durante la jornada de inauguración. En 1974 Leguisamo se retiró de la hípica con un triunfo en el Hipódromo de Maroñas, En Montevideo, montando a Fortimbrás, a la edad de 70 años. Considerado el mejor jinete rioplatense del siglo XX, iIrineo Leguisamo dejó de existir el 2 de diciembre de 1985 en Buenos Aires, a la edad de 82 años. 

lunes, 12 de agosto de 2013

EL "FLACO" NORBERTO AROLDI HOY CUMPLIRIA 82 AÑOS

Arodi y H. Del Carril
Este flaco discepoliano no perteneció a esa pléyade de poetas y bohemios que le precedieron pero tuvo una
vida cronológicamente corta como la mayoría de ellos, y también abarcó mucho. Tal vez le faltó piolín para dejar escritos más tangos.

El teatro y el cine lo reclamaron y él prodigó su sonrisa de oreja a oreja y paseó sin retaceos su fealdad belmondiana (por Jean Paul Belmondo). En todos los frentes batalló con singular talento, demostró su capacidad de observación imbuida de color local: autor teatral, poeta, guionista de televisión y cine, actor.

Creó personajes entrañablemente ligados a Buenos Aires y su gente. Entre ellos, "Cacho de la esquina" y "Los chantas". Sabía reírse de sí mismo: «No hago casi sombra.», decía cachadoramente, y ante la prohibición del faso (cigarrillo), cortaba los cigarrillos en dos con el anhelo de fumar menos.

Anunció la crónica de su muerte por la televisión o en cuanto boliche le pidiera un poema. Solía recitar en El Viejo Almacén una poesía dedicada a sus hijos Sebastián y María Florencia.

Sentenció que no lo iban a poder atar al jonca (ataúd). Su alma enfilaría hacia el Obelisco. El parte médico determinó que fue víctima de una pancreatitis aguda. En 1977, había soportado una tremenda intervención quirúrgica que minó sus reservas.

Porteño hasta la médula, tanguero de ley, su primer tema lo escribió a los 16 años junto al músico Tito Ferrari, y lo tituló “Mi eterna cuna”. Este vals nos habla de su temprano mundo de ternura, forjado a golpes de poesía callejera.

Julio Sosa grabó con la orquesta Francini-Pontier su tango “Pa’ que sepan cómo soy”. Algunos de sus temas son: “Volvamos a la vida”, “Bien de bute”, “A los muchachos de mi barrio”, “Muchachos, a mí no me cambia nadie”.
Aroldi y E. Daniel

(Publicado en Clarín el 21 de marzo de 1998. En la primer frase substituimos 1998 por 2008 y 20 años por 30.)

Nota de dirección: Aroldi hizo el guión de 20 películas, entre 1964 y 1981, entre ellas una de las más destacada fue “El andador” (1967) -de la que también es autor-, dirigida por Enrique Carreras. Un dato curioso, en el film la pareja estelar fue Tita Merello y Jorge Salcedo. Tiempo después, esta obra se estrenó en el teatro con la misma protagonista y su autor, Norberto Aroldi, en el papel masculino.

Otras películas: “Los muchachos de antes no usaban gomina” y “Amor libre” (ambas en 1969), “Amalio Reyes, un hombre”, también dirigida por Carreras, con la actuación protagónica de Hugo del Carril y “Con alma y vida”, de David Kohon (ambas en 1970), “En el gran circo” (1974).

Asimismo, escribió el argumento de “Los chantas” (1975). Y actuó en varios films, el más recordado: “Con alma y vida” (con música de Ástor Piazzolla) , donde hace el papel principal junto a la actriz María Aurelia Bisutti, con la actuación especial de Beba Bidart.

Su primer presentación en el cine fue en “Pobres habrá siempre”, en 1954. También hizo teatro y, a principios de los ’60, ganó una beca para viajar a Italia, donde se perfeccionó y conoció, además, al director Federico Fellini y a otros grandes creadores de Europa. También vivió en México, país donde inició su carrera de escritor y guionista.


               El Flaco
                ( A la memoria de Norberto Aroldi )


Yo lo recuerdo al Flaco
como lo ví una tarde en la calle Castex,
con esa cara de sabérselas todas
y la boca entreabierta, fatigada de puchos.

Por su pinta de duende desprolijo
le caminaba el sueño
con amagos de tango y vino triste.

Tenía la mirada de los que ya se van
pero no les importa.
Me dolió descubrirlo:
Un navegante roto, con el alma empeñada.
Y esa calle tan suya
tan presente
tan penúltima y viva…

Después, alguna noche
un bandoneón lo explicaría todo
y la memoria, pobre mina desvelada,
lo traería de a ratos
como a  un fantasma chanta,

Aquella tarde, en la calle Castex,
fue la última vez que lo ví.
Cuatro días más tarde
el Flaco me dejó..a solas con el alba.



                                      Mario Iaquinandi

viernes, 9 de agosto de 2013

El Mítico Sportivo Barracas

El Club Sportivo “Barracas” fundado el 30 de octubre de 1913 en el salón “Cavour”, previas reuniones en el café “de Campos”, por grupo de idealistas que asistían a las reuniones y por iniciativa de Antonio Albelleyra decidieron formar una entidad deportiva y social. Llego a un acuerdo ese mismo año con “Riachuelo”, que contaba entre sus valores destacados, a jugadores como Juan Hospital, “lolo” Perinetti, Janobelli, Fiorentino, Palazzo, Pesce y Aldea. Por ese convenio y con el nombre de la flamante entidad se le dio afiliación en esa categoría, contando con el concurso de muchos jugadores que habían pertenecido al ”Club Riachuelo”.Así nació el 30 de octubre de dicho año el Club Sportivo “Barracas”.

Es interesante transcribir una parte de la Memoria y Balance del Primer Ejercicio del Club ( 30-10-193 al 31-10-1914). Es la referente al “field de Foot-Ball” y dice: –”Vista la necesidad de obtener un field de foot-ball a la mayor brevedad, la C.D resolvió adquirir las instalaciones del C.A. Riachuelo, situado en la calle Iriarte y Santa Elena. Al efecto, hubo esta institución de hacerse cargo de la deuda de dicho club que ascendía a la suma de $2.733,96, recibiendo en cambio, en alquiler, el terreno y en propiedad de los alambrados, casillas, rollizos, etc., obteniendo también en esta forma, la antigüedad que ante la Asociación Argentina de Football, tenía el C.A. Riachuelo…” – agregándose luego: –”este deporte cuenta siempre con numerosos aficionados. En la presente temporada el club se halla representado en la A.A. de Foot-ball con un team de segunda intermedia, dos de segunda y dos de tercera, dos de cuarta y dos de quinta. En el mes de setiembre pasado, la Comisión resolvió disolver los teams de 2°A., 3°.B., y 4°.B., como medida moralizadora y velando por el buen nombre de la institución”.

En 1916 se gano el campeonato de su división, ascendiendo al círculo privilegiado. Bien vale recordar los nombres de aquellos jugadores vecinos que lograron tan preciado galardón: Muttoni,, Philippe y Bergalli; Genaro Aller, Jeronimo Cumo y Jordan Illan; Sevessi, Fiorito, Pedro Aller, Alberto Sisto y Tomas Inchausti, con su delegado Francisco Basurto. Fue tal la euforia del vecindario por ese trinfo de 2 a 0 ante Sportivo Buenos Aires – su rival de emergencia-* que los botines de los jugadores Sisto y Fiorito autores de los tantos, fueron exhibidos en la vidriera del bar “El Sultan”, en M. de Oca e Iriarte.

La campaña posterior del equipo no pudo ser más brillante. En 1917 y en 1918 sobre 21 y 20 conjuntos que participaron en los certámenes de la Asociación Argentina, se clasificó quinto en ambas en ambas oportunidades.

En fútbol lucieron la camiseta a rayas azules y blancas figuras como Felipe y Roberto Cherro, Marassi, Devita, Mario Evaristo, Mario Fortunato, Manuel Seijas y Alfredo Di Stefano.

En 1919, se construye el nuevo campo de deportes en la acera opuesto, con entrada principal por Iriarte 2870.

En 1920 Sportivo “Barracas” que para construir su nuevo estadio debió indemnizar a los quinteros que ocupaban los terrenos de propiedad de don Leandro Pereyra Iraola, procedió a inaugurarlo, sin imaginarse quizás sus dirigentes y simpatizantes, aun haciendo los cálculos más optimistas, que pronto habría de convertirse en el más glorioso del futbol argentino.

El 25 de mayo de ese año, ante 16.000 espectadores jugaron por la Copa de Competencia del Rio de la Plata, Boca Jrs y Nacional de Montevideo, venciendo el primero por 2 a0; pero la inauguración oficial de efectuó el 11 de junio, con un torneo en el cual participaron además los equipos de “N.O.Boys” y “Tiro Federal” de Rosario, dando el puntapié inicial el intendente Municipal, Dr. José Luis Cantilo. Ese mismo año, argentinos y uruguayos disputaron allí partido y desquite por la Copa Newton. En 1921 tuvo lugar aquel memorable certamen sudamericano en el que se batieron todos los records de entradas del continente y que Argentina gano manteniendo su valla invicta, en julio de 1922 jugaron los famosos vascos, que perdieron con los porteños por 4 a 0 y en 1923 tornaron a enfrentarse los eternos rivales del Rio de la Plata por la disputa de las “Copas Lipton” y “Gran Premio de Honor”.En 1923, se volvieron a colmarse las tribunas el día en que los argentinos vencieron al campeón de Italia 1922, el “Genoa Cricket and Footbal Club”; y la euforia futbolística se renovó en ese estadio que fue “mascota”, cuando se retuvo la “Copa Roca” contra los brasileños y el Trofeo “Rosa Chevallier Boutell”, con Paraguay.

Grandes equipos continuaron desfilando por la cancha de Iriarte y Luzuriaga…

En junio de 1926 se presento el “Real Deportivo Español” con el divino Zamaro, y también el combinado peruano. El 9 de julio de 1927 el “Real Madrid”; el 20 de mayo de 1928 el conjunto escoces “Motherwell” y el 4 de agosto del mismo año el “Barcelona F.C.” con el húngaro Platko y el mago Samitier.

El basquetbol fue impuesto asimismo en el barrio por el Sportivo en 1921. Ese año comenzó a construirse la cancha en el campo de deportes. Luego a principios de 19223 se inauguro la instalada en el local social y al promediar 1936 se construyo en el “anexo-deportivo”, la que sirvió de marco para memorables torneos.

En la sede de Iriarte 2056, se fundó y tuvo su sede la Asociación Argentina de Basquetbol. Por afortunada coincidencia, fue su primer presidente un presagioso dirigente y caracterizado vecino don Ernesto de Gouvea; y represento al club en esa etapa inicial, Jose L. Zueta.

Allá por 1939, el club comenzó a practicar el basquetbol femenino y a partir de 1932 le dio gran incremento, juntamente con River Plate, Ima Sumac, Obras Sanitarias, Unión Telefónica, Estudiantes de la Plata, Harrod’s – Gath y Chaves.

Años siguientes varios clubes zonales, imitaron los pasos del Sportivo en la disciplina Basquetbol, como por ejemplo Sportivo Pereyra, Barracas Juniors y Sportsman.

Puede afirmarse que en los anales del atletismo argentino, jamás se dio el caso de una institución nucleara simultáneamente a una cantidad de figuras tan calificadas como las que representan a Sportivo Barracas. Desde 1927 a 1933 aproximadamente, sus atletas acumularon valiosos títulos y batieron infinidad de records tanto nacionales como sudamericanos. Basta citar los nombres de algunos de los integrantes de esa pléyade de propulsores, para formarse un concepto cabal de cuanto significaron en el orden deportivo local e internacional:

Juan C. Zabala (el extraordinario “ñandú criollo” que el 8 de agosto de 1932 ganara la Maratón Olímpica de Los Angeles”; los precursores Daniel Molina, Atilio y Jose Palumbo, Francismo Torregrossa, Alfredo Torresm y Vicente Cherro, entre otros tantos.

Y así prosiguió su marcha por la senda del deportes el veterano club, fijando rumbos: sus equipos de rugby, hurling y balón; sus clases de esgrima y de tiro al blanco, que nacieron junto con el club, su natatorio de moderna concepción y elegantes línea para la época fue inaugurado el 6 de diciembre de 1925, en el que impartió las primeras lecciones de natación el luego “navegante solitario” Vito Dumas, batió un record de Alberto Zorilla y braceaba una niña con futuro de campeona: Margarita Talamona.


HISTORIA DE BARRACAS. Enrique Horacio Puccia

Sergio Víctor Palma, 33 años después de la gloria

Sobresale la sonrisa eterna sobre su piel morocha.  Sergio Víctor Palma, y empieza a recordar otra vez.
Proyecta a través de sus ojos verdes las imágenes del glorioso 9 de agosto de 1980;los puños que querían tocar el cielo de esa tarde-noche en la que conquistaba el título mundial de los supergallos. Aquel día, que la geografía presentó en sociedad a Spokane, una pequeña ciudad norteamericana lindante con Canadá, en la que el "inusual" boxeador chaqueño, ese que alternaba el gimnasio con la poesía y la guitarra, devastaba a un tal Leo Randolph.

"Randolph se pensaba que era el campeón mundial, pero yo era mejor. Me sorprendió que la pelea se hizo por la tarde y en un estadio más chico que el Luna Park", rememora Palma y advierte que su memoria no es buena a los 57 años. Mas a lo largo de la charla recordará nombres, ciudades y fechas con una precisión de relojería.

Aquel guerrero sin tanta pureza técnica, pero con un corazón que parecía imposible que entrara en sus 55 kilos, llegaba al paraíso pugilístico. Pasaba la frustración de ocho meses antes, cuando fue vencido por el colombiano Ricardo Cardona en Barranquilla. "A Cardona le gané, lo dejé KO parado. Pero le levantaron el brazo a él y yo aplaudí. Igual, interiormente sabía que el campeón mundial era yo", intenta convencer.

Dice que ese combate en Colombia fue una bisagra y se despacha con un bagaje de definiciones de vida que desnudan su pasión por la literatura ("Todos los que van a la humildad llegan a la soberbia"...; "Las virtudes son inalcanzables cuando se las persigue").

Era humilde por temor, asegura: "Mi esforzada modestia no era otra cosa que cobardía. Nunca decía que iba a ganar una pelea, porque tenía miedo a comprometerme".

Encaró de otra manera, entonces, el combate con Randolph. "Después de que le gane no va a tener ganas de volver a subirse a un ring", señaló extrañamente verborrágico. Ese cambio de personalidad desembocó en el principio del fin de la relación con su entrenador de siempre, Santos Zacarías. Pero la promesa se cumplió:noqueó en cinco rounds, trajo el título y Randolph, de 22 años, anunció su retiro tras la pelea.

Cuesta encasillarlo en los recuerdos de su día de gloria. Se apasiona debatiendo sobre historia;critica y pondera a San Martín, Juárez Celman, Roca, Menem...

Expone con orgullo su condición de multifacético y enumera sus actividades.Recorrió todas los estratos del periodismo: hizo radio, televisión y gráfica. Preparó a actores para papeles de boxeadores y grabó un disco con canciones propias.

Su sueño de casi dos años y cinco defensas como campeón del mundo se derrumbó con la Guerra de Malvinas en el aire. Fue el 12 de junio de 1982, en Miami, ante el dominicano Leo Cruz. "Lo de Malvinas me desbordó. Me la pasé llorando y Cruz me mató a trompadas los quince rounds. Antes de la pelea le había dicho a Zacarías que no quería que me entrene más. Y cuando él volvió de Miami -yo había regresado antes-, lo primero que hizo ante los micrófonos fue volcarme una bolsa de m...", cuenta con un dejo de bronca.

Una persistente lesión en la mano derecha lo retiró en 1990, con 62 peleas (52-5-5 y 19 KO). 
Repasa la realidad de sus cuatro hijos, menciona a Liliana, su actual mujer, y se niega a vivir del ayer: "Soy lo que soy hoy. Aquello ocurrió hace 33 años. Y una vez que pasaron no son nada..., pero pasaron y no vuelven. Y uno anda pa´ adelante, vio?"

jueves, 8 de agosto de 2013

JORGE CAFRUNE CUMPLIRÍA 76 AÑOS



El 8 de agosto de 1937 nació en la provincia de Jujuy el cantor criollo Jorge Cafrune. Reconocido por una potente voz, era una figura cautivante para el público folclórico que lo seguía en festivales por todo el país. Interpretaba un amplio repertorio que incluía canciones tradicionales con otras de denuncia social. Falleció en un accidente de tránsito en febrero de 1978. Su recuerdo, en tramos de un reportaje de la revista Folklorede 1965 reproducido por la La Maga treinta años después.

“’Principio quieren las cosas…’, dice Martín Fierro. La vida de Jorge Cafrune debe empezar por el principio, es decir por su nacimiento. Pero dejemos que él mismo nos cuente…
‘Yo nací el 8 de agosto de 1937 en El Sunchal, un lugar del departamento de Perico del Carmen, a 27 kilómetros de la ciudad de San Salvador de Jujuy, en una finca llamada Villa Matilde, propiedad de mi padre José Cafrune. Y mi madre es Matilde Herrera. Allí viví hasta los trece años y estudié hasta el segundo grado en la escuela donada por mi padre en la misma finca. Sembrábamos tabaco Virginia. Mi padre se hizo trabajando y yo me formé a su lado conociendo absolutamente todo de lo que son en Jujuy tareas de campo.
‘Lo que más me gustaba era arar. De niño soñaba con esto. Me sé mantener bastante bien a caballo, he domado y me perfeccioné como jinete en el servicio militar, en el Regimiento II de Montaña. Siempre he sido de a caballo, siempre me gustaron los caballos… el primero que tuve se llamó El Indio, un moro, cruza de árabe y criollo, magnífico animal. Tengo premios que mi padre ganó con ese caballo, en carreras de sortijas… era un animal muy rico en las riendas, muy respetado en la zona, muy blando de boca. Cuando papá, hijo de sirio-libaneses, entraba en los boliches, hacía entrar también al moro hasta el mostrador… era un caballo muy noble. Mi padre fue y es hombre de campo. Por eso comparo yo al criollo con el árabe, y no es que uno se vaya al campo por querer ir, sino porque realmente yo lo siento.
(…)
-¿ Cómo se inició usted cantando?
-Cuando yo tenía diez años, mi padre, a quien llamaban el Turco Cafrune, había comprado una hermosa guitarra que, con método y todo, le había costado veinticinco pesos. Él cantaba bagualas. La guitarra solía quedar arriba de una mesa grande. Mi papá hacía por aprender… pero su trabajo rudo no era para eso. El hombre que toca la guitarra es, por lo general, el que tiene un trabajo liviano de campo. El trabajo rudo le pondría las manos duras para el encordado. Yo pasaba al lado de la guitarra y le acariciaba las cuerdas. Él no nos permitía tocarla aún, por miedo de que se la rompiéramos. Un día, en un descuido, la rajaron de un golpe. La hicieron arreglar y se la vendieron a un capataz. Yo fui a Jujuy a estudiar secundario y cuando cumplí diecisiete años mi padre me regaló una guitarra marca Tango, marcada en la cabeza. Con el estuche y todo le costó cincuenta y cinco pesos que entonces era plata. Era preciosa. Mis primeros profesores fueron la señorita Facio y, sobre todo, el famoso Burro Lamadrid, el querido, extraordinario e inteligente guitarrista, a quien admiran hasta hombres como Eduardo Falú. Aprendí mucho viendo. Don Nicolás Lamadrid no quería enseñarme a rasguear antes de saber mover los dedos. Pero yo lo veía encandilado… y lo escuchaba con embeleso. En un Carnaval de entonces me encontré con el changuito Bustamante, que ahora está en Buenos Aires, y con Carlos Chumacero. Formamos un trío, allá por 1956, para los corsos de Villa Gorriti. Cantaba Chumacero, punteaba Bustamante y yo acompañaba. Sabía bastante poco entonces. Trío más desparejo no debe haber habido. Así fue mi inicio. Por entonces canté en el Colegio del Salvador una chacarera que era mi punto fuerte, mi pieza brava, la Chakay Manta… Después conocí a Luis Valdez, quien quería formar un conjunto. Al tercer día de reunimos, fuimos a HyR, el sello grabador que iba directamente al acetato y grabamos un disco para llevarlo a mis viejos a Jujuy. Así nació Las Voces del Huayra… Todavía conservo el disco que grabamos para mis padres con Serenata riojana de un lado y Noche, noche… del otro. Poco más tarde nos contrató Ariel Ramírez para el Salón Dorado de Mar del Plata. Fue un éxito. Ariel se lo puede contar.
‘Era en 1959. Tres meses anduve con Los Cantores del Alba. No sé dónde nos peleamos con los muchachos y decidí mandarme mudar… Me fui a Salta… Pasé la fiesta con mis padres, luego caí a Buenos Aires y me encontré con que Jaime Dávalos estaba en la Capital, con un espacio de televisión. Lo fui a ver, lo saludé, fuimos a comer juntos y le pregunté qué iba a hacer. ‘Me voy a Cosquín’, me dijo. Yo no tenía noticia de aquéllo. ‘¿Qué es Cosquín?’, le pregunté. ‘Hay un festival. ¿Por qué no vas?’ Jaime salió a las siete de la tarde y yo tomé el ómnibus de las ocho. Jaime había quedado en presentarme gente allá. En Cosquín me encontré con los Hermanos Albarracín, admirables artistas a quienes yo había conocido en mis giras, en La Rioja. Es inconcebible que no haya una grabadora en la que puedan grabar un long-play. Nos fuimos a la confitería La Europea y me puse a cantar. Me escuchó el doctor Widner y me oyeron unas señoritas muy gentiles, con las que conservo amistad; mis verdaderas madrinas. Me invitaron al II Festival de Cosquín. Lo demás, es cosa sabida… Aquello fue en enero de 1962…
(…)
-¿Cuál es el más reciente long-play que ha grabado, Cafrune?
-Bueno, ya se ha hecho pública la noticia y por cierto que ha interesado mucho. Es: El Chacho: vida y muerte de un caudillo, un disco que proyectó y produjo artísticamente el poeta León Benarós. La idea nació hace casi un año. Benarós la expuso en Cosquín a Hernán Figueroa Reyes, asesor folclórico de Columbia, que estaba también en el Festival, siempre en busca de valores nuevos. El autor de Romancero argentino me propuso como intérprete. Hernán se entusiasmó y yo también. León Benarós trabajó desde entonces, madurando el tema, que, por supuesto, ya conocía bien. Yo mismo he leído sus extensos y bien documentados prólogos a El Chacho y los Montoneros, por Eduardo Gutiérrez, obras que publicó la editorial Hachette en su colección El Pasado Argentino, con muy interesantes estudios preliminares de Benarós. El poeta escribió entonces la totalidad de las letras de las canciones y llamó luego a los músicos que le parecían adecuados para el carácter de las composiciones respectivas. Esos músicos fueron nada menos que Carlos Guastavino, Eduardo Falú, Adolfo Ábalos y dos hombres jóvenes, pero ya valiosos: Carlos Di Fulvio y el riojano Ramón Navarro.”

lunes, 5 de agosto de 2013

VUELVE “MUÑECAS BRAVAS”

Después de un año de trabajo conjunto recorriendo el país, Geraldine Trenza Cobre, Patricia Malanca y
Gaby “La Voz Sensual del Tango” junto al pianista Marcelo Baldonedo vuelven a presentarse en la Ciudad de Buenos Aires con un show que reúne una selección de lo mejor de las bravas.

Un recorrido por las letras de tango de todos los tiempos que han referido a la mujer, mucho humor y un bloque dedicado al inigualable Carlos Gardel es algo de lo que podrá disfrutarse el próximo martes 27 de Agosto en el Centro Cultural Recoleta(Junín 1930). Este audaz trío es sin duda la revelación de los últimos tiempos. Su tarea en las tablas sorprende gratamente a los amantes del tango y atrae al público joven ya que no se trata de simples interpretaciones aisladas sino de una obra musical con mensajes claros, entretenimiento y excelente desempeño de cada una de las muñecas que cumple un rol particular dentro de la trama del espectáculo.

Desde el ama de casa, la madre, la esposa, la amante y la amiga hasta la mujer autónoma, trabajadora, superada o luchadora; todas encuentran identificación con Muñecas Bravas que no sólo generan adhesión del público femenino, sino que también permiten un momento de real distención y alegría para los hombres.

El gancho con los jóvenes es la accesibilidad de discurso y letra utilizado por las chicas y el humor popular que las acerca cada día más a su público. Lo demuestran sus exitosas presentaciones ante multitudinarios y heterogéneos públicos como el del Festival Nacional de Tango CARLOS DI SARLI de B. Bca. (Octubre 2012), Festival Internacional de Tango de Justo Daract (Diciembre 2012) o la Fiesta de la Soberanía Patagónica (Marzo 2013), donde resultaron ovacionadas.

El Centro Cultural Recoleta ocupa una de las construcciones más antiguas de Buenos Aires. En su arquitectura encontramos muestras de conservación, refuncionalización y diseño contemporáneo. Fundada en tiempos coloniales, formó parte de un extenso solar cuya unidad original se modificó por el desarrollo de diversos establecimientos.
El comitente Juan de Narbona inició las obras con una pequeña capilla, cuatro celdas monásticas y un obrador. En 1716 doña Gregoria Herrero de Hurtado dona estos terrenos, o Chacra de los Ombúes, a la Orden de la Santa Recolección de la estrecha observancia del Señor San Francisco. 
El franciscano Andrés Blanqui, activo en nuestro país entre 1717 y 1740, diseña la fachada de la Iglesia y parte del claustro.
Luego de 15 años de construcción, la inauguración de la Iglesia y el Convento se realiza el 12 de Octubre de 1732, día de la Virgen del Pilar. Esta advocación fue elegida por Narbona, que era oriundo de Zaragoza y devoto de la Pilarica.

Hasta comenzado el siglo XIX, la vida en el monasterio franciscano se desarrolló sin interrupciones. En 1815 el padre Francisco de Paula Castañeda habilitó, en este claustro, una Academia de Dibujo a la que asistieron 18 alumnos. Tiempo después, la entidad fue trasladada al Consulado de Buenos Aires.
En 1822 el Decreto de Reforma Eclesiástica del Gobernador de Buenos Aires, General Martín Rodríguez y su ministro Bernardino Rivadavia, determina la exclaustración del Convento. Durante ese año se inaugura, sobre la antigua huerta de los Recoletos, el primer cementerio público católico de la ciudad de Buenos Aires.
Expropiado el edificio del convento, el complejo fue utilizado como escuela de agricultura, jardín botánico, prisión y cuartel. Durante el segundo mandato del Gobernador Juan José Viamonte se funda, en un sector del ex – convento, el Asilo de Mendigos (1833).
A partir de 1880, el ingeniero Juan A. Buschiazzo realiza una refuncionalización total del edificio convirtiendo al hogar de ancianos en una obra modelo de los paradigmas higienistas del siglo XIX. Este predio y sus alrededores fueron objeto privilegiado del plan de reformas urbanas de Torcuato de Alvear, el primer intendente de Buenos Aires.
En 1948 este edificio fue declarado monumento histórico nacional a fin de promover su conservación. Hasta 1978 en sus instalaciones permaneció el asilo de ancianos Hogar Viamonte.
Como parte de los festejos del cuarto centenario de la fundación de la ciudad de Buenos Aires la municipalidad dispone en 1979 la transferencia de este edificio a la Secretaría de Cultura. Ese mismo año se designa a los arquitectos Jacques Bedel, Luis F. Benedit y Clorindo Testa para remodelar la construcción destinada a convertirse en un complejo museológico. En diciembre de 1980 es inaugurado bajo el nombre de Centro Cultural Ciudad de Buenos Aires. Denominación que fue modificada en 1990 por la actual, Centro Cultural Recoleta.
Durante la década del 90, se inaugura, tras la antigua fachada de Azcuénaga y Pueyrredón, el Buenos Aires Design Center. El diseño de esta construcción, en su mayor parte subterránea, fue liderado por Clorindo Testa junto a los arquitectos Giselle Graci y Juan Genoud.
En medio de una intensa actividad cultural, la construcción y restauración del complejo fue desplegándose en diversas etapas que se extienden hasta la actualidad. Durante los festejos de los 30 años del Centro Cultural, en diciembre de 2010, se desarrolla la puesta en valor y reapertura del Auditorio El Aleph.
Inaugurado como capilla del Asilo en 1885, cien años más tarde fue reacondicionado para abrir sus puertas como sala de espectáculos. Actualmente se desarrolla un plan de restauración de las cubiertas y la decoración interior de la cúpula de esta capilla. Este recinto conserva su estilo neo gótico original y un mural firmado y fechado por Francisco Paolo Parisi en 1906.